Eco

Así sería nuestro blog, si fuesemos un país. Porque si de cinco, uno quiere, cinco puede. Pero de si cinco, nadie quiere pues nadie quiere.

Llevamos desde agosto sin publicar nada, cada uno con sus razones. No pasa nada, no soy cotilla. Y a decir verdad, me alegro, porque podría evaluar el mediocre nivel tanto narrativo como informativo de esta página, pero mis colaboradores tienen mi msn por lo cual no me conviene. Al fin y al cabo, no ha sido este uno de esas ideas pasajeras que dichas en grupo molan tanto y hechas dejan de ser grandes ideas. Es curioso, siempre que escribo suelo tener la tendencia de hablar a una segunda persona, es mi gusto por la conversación que se revela. En un solo parráfo he sido capaz de escribir una serie de frases inconexas y de reiterarme y divagar solo para expresar una realidad. Que este blog es como un desierto. Ves presencia humana cada ciertos meses.

Después de sonar como el borracho del bar que es el hazme reír del pueblo y que harto de todos se levanta sobre la mesa y completamente ebrio señala los errores de cada espectador. Ahora me convierto en el político populacho que promete sacar a este blog del vacío y convertirlo en un bonito lugar donde estar. No os preocupéis, en tres semanas me recordaran que no he escrito nada nuevo en el blog desde hace dos semanas.

Si en vez de escribir usase el copy/paste, que bonito y abundante sería el blog.