miércoles, julio 05, 2006

Sin Perdón




Ahora mismo podría empezar una larga y basta crítica sobre esta obra maestra del cine. Pero ese no es mi objetivo, mi objetivo al escribir esta entrada de hecho no lo tengo claro. No me pararé en el guión, en la dirección tan tranquila y paciente de Eastwood, ni en los actores y lo cómodos que están interpretando sus papeles. Un cinéfilo puede ver aquí una gran película, un fan del western se ríe y maravilla ante lo que está viendo.



Sin perdón es un western que mira atrás y analiza que ha hecho en su vida como género. Se burla en un tono respetuoso de lo que ha hecho, pero al mismo tiempo esta orgulloso de ellos. En esta película el pistolero protagonista se pone enfermo de tanto dormir al aire libre, los brutales asesinos no son capaces de disparar a un hombre herido y acertar, el protagonista le cuesta controlar a su caballo y prefieren asesinar a los encargos cuando están solos o si puede ser con un rifle a distancia en vez de platarles cara y mirarse a los ojos para convatir con su revolver en un duelo. Más importante aún es la leyenda que les ha absorbido. El joven y apuesto pistolero que parece el más chulo no es más que un jovenzuelo que ha oído mucho acerca de Billy el niño, Pat Garrett, Wyatt Earp, Jesse James, el tiroteo en el O.K. Corral y cualquiera de esas leyendas del western que en estos días tienen más de mitos que de verdad. Pero obviando al joven lo importante son los otros cuatro protagonistas. Bob el Inglés apodo el Duque, un hombre que se ha creado él mismo su propia leyenda, y detrás de ese apodo y esos libros de verdad hay un gran pistolero, pero el prefiere ser leyenda. Little Bill es básicamente un pistolero mítico, un sheriff cruel, que no quiere ser ni mito ni leyenda y que en muchas de sus conversaciones se dedica a arrojar verdad sobre tantas suposiciones y heroicidades de "El Pato" y otros pistoleros, además de dar su negativa opinión sobre todos esos chulos que se sietan en las tabernas creyéndose los mejores por llevar un revólver. Ned Logan es el más aunténtico de toda la película, es un hombre que de jvoen se divertía, qué prefiere sentar cabeza y que sabe que conlleva su trabajo, el vive en la realidad. Tras repasar a todos estos personajes llegamos al importante, a William Munny, interpretado como no podía ser menos por Clint Eastwood. Un hombre que ha sido absorbido por su fama de pistolero en juventud. Munny podría ser el personaje de the man with no name de viejo, y mientras que la leyenda lo eleva como el más grande pistolero el se da cuenta de lo que es en realidad. Un asesino, quita la vida a la gente, y le pagan por esto. Detrás de esa golirficación hay un anciano que sabe que la gloria y lo que el ha hecho no tienen relación.

Y así estos personajes van fluyendo, chocando sus personalidades en una época en la que vale más la brutalidad que el diálogo y en la que nada es lo que parece y que la realidad, un mundo donde la gente habla indignada sobre la muerte de su presidente, tiene a hombros una leyenda.


Sin Perdón solo puede acabar de una forma. En una película en la que la realidad es más importante que la leyenda, en la que ya no se sabe quién es el bueno y quién es el malo y en la que finalmente toda violencia tiene un efecto, pero puede que ninguna causa. Unforgiven termina en un tiroteo pausado y brutal en el que descubrimos que al fin y al cabo, para crearse un mito tiene que haber una base detrás. William Munny nos revela eso al hacer justicia él mismo. Y tras esto vuelve a la realidad, en un bello plano en el que la película se cierra como empezó.

Detrás de todas estas lecturas nos queda también una verdad y es lo que aportado el western al cine. Esa belleza para captar un paisaje en la naturaleza o el paisaje que encierra una cara o una mierda. Los planos, la forma de dirigir y de contar una historia, una historia sencilla convertirda tal vez en una película llena de fuerza. Sin Perdón es para mí, un poema de amor al western.

Como decía Bob Dylan en una canción:
Mama, put my guns in the ground
I can't shoot them anymore.
That long black cloud is comin' down
I feels I'm knockin' on heaven's door.